De la mano del director que ha estado detrás de realizaciones tan impresionantes como “Shaun of the dead”, “Hot fuzz” y “Scott Pilgrim vs. The world” llega su nueva película, en donde pule a la perfección el uso que le da a la imagen y a la música para que se sincronicen en pantalla. Esta es una de las mejores cintas en lo que va del 2017, es un trabajo original que corre a toda velocidad desde los primeros minutos de escena, y que continúa maratónicamente hasta el final.
Cuanta la historia de Baby (Ansel Elgort) un joven que todo el tiempo está escuchando música en su i-pod, y que se dedica a conducir en los robos que hace una agrupación criminal liderada por Doc (Kevin Spacey). El protagonista quiere dejar esta vida ligada al crimen, pero la realidad lo tiene metido en nuevos atracos. En el medio se enamora de Debora (Lily James) una camarera que al igual que él sueña con la música y los autos.
Lo primero que uno puede ver y sentir cuando visualiza un filme como Baby driver, es que es una composición muy original, la que fiel al estilo del director británico, hace una sincronización casi perfecta entre lo que se ve en pantalla con la música que se está escuchando. Desde una escena de créditos iniciales que tiene a Baby comprando café, mientras escucha música y la letra de la canción aparece pintada en las paredes, a tiroteos en donde las balas son gatilladas al compás del sonido.
Y el soundtrack es una mezcla que pasa por muchos estilos, desde el rock de Queen, hasta el soul, y temas populares como “tequila”. Cada elección ha sido precisa, y calza a la perfección con lo que se ve en pantalla. En ese sentido, la elección de canciones que acompañan al protagonista y sus aventuras es transversal, y para gustos variados.
La película tiene un balance entre tensión dramática, momentos cómicos y otros de acción. En el medio hay instancias para el romance, pero no es algo que desentona la trama, de hecho, potencia al personaje de Baby y lo vuelve más complejo. Lo anterior fusionado con un sonido increíble, y una fotografía rápida y sagaz como lo es el conductor de la ficción da como resultado una joya audiovisual que de seguro se volverá de culto con el tiempo.
Su reparto también es meritorio, ya que a la cabeza está Ansel Elgort en el rol principal, pero es acompañado por actores de la talla de Kevin Spacey, Jamie Fox y Jon Hamm. El casting estuvo muy bien escogido, aunque el protagonista destaca sobre todo por el hecho de que, sin hablar mucho, es un personaje carismático y complejo.
Baby driver un paseo en auto, y uno fantástico acompañado de un reparto genial, y una serie de temas musicales que son sincronizados en su gran mayoría a la perfección con lo que ocurre en escena. No hay películas así de originales, por lo que estamos frente a un cine de autor con personalidad y que vale la pena revisar este año. Una de las mejores realizaciones de lo que va del año, y que ojalá alcance audiencias cada vez más masivas, porque de verdad vale la pena el viaje al cine y visionar esta joya.
Por Esteban Brito Quinlan